FIRMEZA

Mañana se celebra la reunión entre Rodríguez y Rajoy para tratar sobre la ¿nueva? situación que se presenta tras el anuncio de E.T.A y su ya famoso "alto el fuego permanente".

Dicen que ya hay en el PP quienes quieren correr a alinearse con las tesis gubernamentales para no quedarse fuera de la foto de la tan cacareada paz. ¡En fin! Algunos no pierden la oportunidad de ponerse en evidencia a la menor ocasión.

En mi modesta opinión, lo primero que debe hacer Rajoy es exigirle al presidente de este desgobierno que le explique detalladamente en qué consistieron las conversaciones ya mantenidas con los terroristas, a qué acuerdos se llegaron y qué pasos se han dado para conseguir la tan trabajada tregua asesina. Rodríguez y su banda han mentido a los españoles y exigimos una explicación al respecto (¿está claro? M.T. de la Vogue, dixit).

Después el líder de la oposición debe advertirle a este presidente tan embustero que no hay paz con concesiones políticas a los terroristas, se debe garantizar la actuación de la justicia y el cumplimiento de las penas por parte de los etarras. No cabe comparación posible con el caso del I.R.A., aquí los muertos los han puesto siempre los mismos. Por eso, es fundamental que sean las víctimas las primeras en ver cumplidas sus aspiraciones de memoria, dignidad y justicia (no debe olvidar el Sr. Rajoy que por ese motivo se ha manifestado y ha pedido la movilización de muchos españoles que no entenderíamos una postura tibia al respecto).

Por último, Rodríguez debe garantizar el cumplimiento del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo y, dentro de ese marco, encuadrar las posibles negociaciones con los asesinos. Ambos deben comparecer ante los ciudadanos de la hasta ahora nación española para explicar los compromisos alcanzados, exponer sus posturas (haya o no acuerdo) y asumir sus responsabilidades en un proceso que debe conducir a la disolución de la banda terrorista, no a la cesión o rendición de España por unos intereses meramente electorales.

Muchos españoles exigimos firmeza sin complejos, sin claudicaciones ante unos individuos que ponen encima de la mesa muertes, chantajes, extorsiones, amenazas y secuestros (no accidentes). No podemos hacer que todo esto les sirva para obtener un beneficio pero dudo mucho que Rodríguez lo tenga claro, por eso, Rajoy debe dejar las cosas en su sitio. Por el bien de España, espero que lo haga y si no hay acuerdo, a casa con la cabeza bien alta y a seguir luchando por todos los que aún queremos que en este mal llamado "proceso de paz" los vencidos sean los asesinos y los vencedores los españoles de bien.